Renovado

Hoy te he mirado y lo he vuelto a sentir. Mi corazón crujía en pedazitos cuando te acercaste después de meses sin mirarme, ¿Por qué haces esto?¿Por qué me torturas? No ves que está superado. ¿Eso es lo que te molesta verdad? Te molesta que ya no sienta nada, te molesta que no esté bajo tu influjo, te molesta no saber que siempre estaba ahí y que ahora no. ¿Por fin te has dado cuenta? Has tardado meses, pero has sentido cómo te faltaba algo.
Sabes que mi corazón es debil, sabes que sufre, pero tu único propósito es apuñalarlo cada día. Parece que sientes un morbo especial al ver sufrir a la gente, en especial a mi.
¿Pues sabes qué querido mio? Hoy vuelvo a ser libre. En el momento en el que te has acercado y he sentido volver a crujir los pequños trozitos de mi corazón lo he visto claro. Me dolía porque sabía que tu ibas a volver. Sabía que te arrepentirías de todo. Pero te doy una noticia. Ese crujir que has oído a sido de liberación. Me he sentido bien despues de tanto tiempo. He logrado romper ese hechizo de sirena con el que me tenías atrapada. Crujía y crujía porque nacía mi nuevo corazón cual fenix renace de sus cenizas. Ahora soy mas fuerte, ahora sé que me puedes hacer daño, ahora se que no volveré a ser tuya. ¿Piensas que no puedo? Inténtalo, pero no lo conseguirás. Me ha cosatado, pero lo he renovado, puedo girarme y gritar al viento: "Soy libree". Soy libre porque ya no me haces daño, ya no vas a intriducir esa daga llena de veneno en mi corazón.
Lo siento, pero me voy. Dejaré que el rencor y la maldad de tu corazón te reconcoman. Dejaré que tu odio hacia los demás lo sientas hacia ti. Dejaré que no sientas el amor que un día sacaste de mi corazón. ¿Ahora eres tu el que tiene miedo? Pues sufre en la oscuridad donde me mandaste. No volveré a caer en tu tampa mortal. No volverás a encerrar mi corazón en una caja para que cuando te apetezca lo saques y practiques tu magia maligna. Ahora es tu turno. Ahora debes saber cómo me he sentido yo.

Solo te podría desear que encontrases el amor, que lo vivieses y que lo sitieses; pero no lo voy a hacer. El rojo de tu sangre se ha tornado negro. Ya no tienes escapatoria, tu papel será el de hacer daño y el de no encontrar aquello que los demás anelamos.
Puede que me cueste, pero mi Príncipe Azul llegará montado en su caballo y no tendré que volver a besar una rana, aunque tu seas un escorpión.
Vive deseando lo que nunca tendrás, vive arruinándote la vida, vive por hacer daño, pero a mi nunca me podrás tocar una vez más.